Contexto:

Es bastante complicado tener que escribir esto, porque es algo demasiado personal. Y es que no me había dado cuenta de lo que realmente es “burnout” hasta que lo viví. Siempre lo veía de lejos, como receloso, como si nunca me llegara a pasar, por qué claro “Francisco, siempre ha sido una persona productiva, ordenada y trabajadora”, queriéndome siempre excusar. Año pasado, mi perro falleció, siendo esto una experiencia que cambió el rumbo de mi vida. Desde antes de eso, cuando me di cuenta de que mi perris tenía cáncer, yo sentía que mi vida iba de caída, en picada. Sentía que todo se me iba. Pero de alguna manera lo logré manejar. Hasta que perdió la batalla. Tengo que admitir, que el duelo que tuve las primeras semanas, viéndolo el día de hoy, no tuvo que haber sido de esa manera. Simplemente lo evité. Lo cual me afectó más tiempo después. Luego, ese mismo año, sucedieron cosas y logre encontrar la paz. Pero mi mente, de alguna manera seguía en todos lados, y no podía sentarse.

Como me sentía

Me sentía cansado, ya mis pasatiempos no me interesaban, ni me generaban nada, y realmente solo pasaba viendo videos en YouTube, y llenando mi agenda de cosas sin sentido para sentirme “productivo” y ocupado, para luego no hacerlas, estresarme y castigarme al respecto y sintiéndome miserable porque yo mismo, no las terminé. Y no precisamente estoy hablando de mi trabajo, porque realmente siempre he cumplido con mis responsabilidades externas, pero sí estuve teniendo un problema serio de concentración para acabar mis tareas. De verdad sentía que mi vida estaba siendo piloteada en automático. Lo que antes me apasionaba dejó de emocionarme; empecé a irritarme y enojarme por cosas pequeñas y, sin notarlo, descuidé mi sueño, mi alimentación y mi autocuidado. Eso sí, esto no fue de un día para otro. Fue un goteo: primero el estrés, luego el cansancio crónico, hasta luego sentirme vacío, que ya eso era parte de mi vida. Pensé que era que me estaba haciendo vago, pero realmente no era. Nunca lo he sido, esa nunca ha sido mi personalidad, ni mi forma de ser.

Hablando con mi psiquiatra entendí algo superimportante: no era pereza. Era burnout, un agotamiento emocional, físico y mental que aparece cuando el estrés supera nuestra capacidad para afrontarlo. No por nada tengo depresión, ni me enfermaba acaba rato. Bueno, al menos, el burnout nos deja incluso aún más vulnerables a eso, y a la ansiedad.

¿Por qué lo cuento?

Ponerle nombre realmente me devolvió la compasión por mí mismo. Reconocer estas señales a tiempo cambia el curso de nuestra vida, para bien. La desconexión, la perdida de motivación*⊕“La cual es muy diferente cuando hablamos de disciplina vs. motivación.”
y pasión, irritabilidad, aislamiento, cambios de apetito y sueno; no son cosas que queremos andar cargando en nuestro día a día.

Durante mucho tiempo de mi vida pequé de esas personas que se sienten productivos por tener la agenda llena, por querer hacer todo, al mismo tiempo. Pero me di cuenta por las malas que eso no se puede hacer. Claro, se puede, pero a costo de nuestra salud física y mental.

Mirá, yo estuve haciendo durante mucho tiempo demasiadas cosas; trabajar, ir al gimnasio, salir con mis amigos, dedicarle tiempo a mi familia, tener novia, estudiar para exámenes de certificación, leer, (realmente) escuchar música, ver películas siempre con mis amigos por Discord, dedicarle tiempo a mi homelab, y siempre estar aprendiendo cosas nuevas de manera constante por la naturaleza de mi profesión como ingeniero en la nube. Pero no todo se puede hacer, al menos no van a salir de la manera correcta, no es sostenible a largo plazo.

Debemos de apoyarnos entre todos

Si es que le pasa lo mismo a usted, mi recomendación, es darse cuenta, ponerle nombre, investigar y cuestionarse; buscar ayuda profesional, y darse una pausa. Tomar todas las tareas, ponerlas sobre la mesa, y empezar a priorizar: ¿qué es lo mejor para mí en este momento? Dese permiso de fallar, de que las cosas no salgan bien a la primera e incluso de desechar la idea, pero al final del día, siempre ser conscientes.

La pereza no te roba lo que amas, el burnout sí.

Espero que así como yo, tome usted conciencia; eso puede ser el primer paso para una temprana recuperación.

Espero pronto poder hablar más sobre este tema.
Gracias por leer — Francisco.

🇬🇧 English Version

It wasn't laziness, it was burnout

It's quite complicated to have to write this because it's something very personal. And it's just that I hadn't realized what “burnout” really is until I experienced it. I always saw it from afar, cautiously, as if it would never happen to me, because of course, “Francisco has always been a productive, organized, and hard-working person,” always trying to excuse myself. Last year, my dog passed away, which was an experience that changed the course of my life. Even before that, when I realized my dog had cancer, I felt like my life was spiraling downward. I felt like everything was slipping away from me. But somehow, I managed to handle it. Until he lost the battle. I have to admit, the grief I had in the first few weeks, looking at it today, shouldn’t have been that way. I simply avoided it. Which affected me even more afterward. Then, that same year, things happened and I managed to find peace. But my mind, somehow, was still everywhere and couldn’t settle down.

How I felt

I felt tired; my hobbies no longer interested me or gave me anything, and I really just spent time watching videos on YouTube and filling my schedule with meaningless things to feel “productive” and busy, only to not do them, stress myself out, and punish myself for it, feeling miserable because I hadn’t finished them myself. And I’m not even talking about my work, because I’ve always fulfilled my external responsibilities, but I was having a serious concentration problem finishing my tasks. I really felt like my life was being piloted on autopilot. What once excited me stopped doing so; I began to get irritated and angry over small things and, without noticing, I neglected my sleep, my diet, and self-care. This didn’t happen overnight. It was a gradual process: first stress, then chronic fatigue, until feeling empty, which became part of my life. I thought I was becoming lazy, but I really wasn’t. I never have been; that’s never been my personality or who I am.

Talking with my psychiatrist, I understood something super important: it wasn’t laziness. It was burnout, emotional, physical, and mental exhaustion that appears when stress exceeds our ability to cope. No wonder I have depression and got sick quite often. In fact, burnout leaves us even more vulnerable to that and to anxiety.

Why am I sharing this?

Naming it really brought back self-compassion for me. Recognizing these signs early changes the course of our lives for the better. Disconnection, loss of motivation ⊕“which is very different when talking about discipline versus motivation.”
and passion, irritability, isolation, changes in appetite and sleep; these are not things we want to carry with us day to day.

For a long time in my life, I was one of those people who feel productive by having a full schedule, by wanting to do everything at once. But I realized the hard way that you can’t do that. Sure, you can, but at the cost of your physical and mental health.

Look, I was doing way too many things for a long time; working, going to the gym, hanging out with my friends, spending time with my family, having a girlfriend, studying for certification exams, reading, (really) listening to music, watching movies always with my friends on Discord, dedicating time to my homelab, doing and producing art, and always learning new things constantly due to the nature of my profession as a cloud engineer. But you can’t do it all; at least it won’t turn out right, and it’s not sustainable in the long run.

We need to support each other

If the same thing is happening to you, my advice is to become aware, name it, research and question it; seek professional help, and take a break. Take all the tasks, put them on the table, and start prioritizing: what is best for me right now? Allow yourself to fail, to have things not work out the first time, and even to discard the idea, but at the end of the day, always stay aware.

Laziness doesn’t steal what you love, burnout does.

I hope that just like me, you become aware; that can be the first step toward early recovery.

I hope to be able to talk more about this topic soon. Thank you for reading; see you around.